Con el verano no sólo llega el calor, sino un sinfín de parásitos que pueden poner en peligro nuestra salud y la de nuestros animales. Uno de estos bichillos molestos son las garrapatas. Las garrapatas forman parte del grupo de parásitos externos o ectoparásitos y viven a costa de la sangre que obtienen del organismo huésped que parasitan. Entre las principales molestias que causan, podemos destacar las siguientes:
1. Irritación en la zona donde se adhieren: Nuestros animales pueden sentir picor en el punto donde la garrapata se ancla a la piel. Como consecuencia del picor, los animales se rascan pudiendo provocarse autolesiones susceptibles de infecciones secundarias. Es relativamente común la aparición de abscesos en estos puntos
2. Pérdida de sangre: Si un número suficiente de garrapatas ha infestado a nuestra mascota, ésta puede desarrollar anemia que se evidencia con debilidad generalizada.
3. Reacciones tóxicas: Tras alimentarse, muchas garrapatas pueden liberar sustancias nocivas en la sangre del huésped. Una sola garrapata puede causar parálisis y muerte en tan sólo una semana tras la picadura.
4. Transmisión de enfermedades: Las garrapatas pueden transmitir enfermedades graves tanto a animales como a personas. Ejemplos de estas enfermedades son: enfermedad de Lyme o borreliosis, ehrlichiosis, babesiosis, hepatozoonosis, etc.
Las zonas del animal donde principalmente se adhieren las garrapatas son patas, orejas y cuello, pero también podemos encontrarlas en cualquier parte de su cuerpo.
Lo más importante para evitar a estos pequeños y molestos parásitos es la prevención. En nuestra clínica disponemos de todo tipo de productos efectivos que se adaptan a cada situación y animal. En nuestro empeño por mantener la salud de vuestras mascotas insistimos en LA IMPORTANCIA QUE TIENE EL IMPEDIR QUE LOS INSECTOS Y ARTROPODOS HEMATOFAGOS (chupadores de sangre) TRANSMITAN ENFERMEDADES A NUESTROS ANIMALES DE COMPAÑÍA Y A NOSOTROS MISMOS.